Decepcionada. Todo comenzó con algo bonito, si,
para mi fue algo maravilloso. Decías claramente que me querías e insistías en
que no me abandonarías, que querías todo y cada uno de mis sentimientos. Yo
misma te decía que las cosas no se consiguen así como así, y te dije que te
gustaban las cosas difíciles, tú mismo dijiste no lo difícil no, los retos. Ahí
fue cuando creí que realmente ibas a luchar, pero no simplemente a luchar para
una vez no, para estar eternamente o hasta que todo fuera mal, realmente mal.
Que nada se pudiera arreglar, entonces ahí era cuando tirábamos la toalla. Me
equivoqué contigo, a lo mejor debí decir un si antes de lo planeado o
directamente aguantar con un no para saber como eres realmente. Ahora
directamente sigo aquí ilusionada y pensando que no eres así. Si soy un poco
estúpida para que mentir y sigo queriéndote como el primer día que empezó todo.
Pero no me desvío, tu seguiste y me has dejado la imagen de un pobre desesperado,
para que mentir. A los dos días ni uno más ni uno menos me encuentro con todo
lo que me dijiste a mí pero para otra. Creo que no fue una equivocación que fue
una desesperación. Solo te digo que ella te dará lo que quieres pero que sé que
deseas estar junto a mí, suena orgulloso
pero es así. Sigues detrás insinuando lo mismo. Solo te deseo que te vaya bien
y que si vuelves espero no estar.